¡RUSIA ES CULPABLE!

Por eso, como entre el blanco y el negro hay una extensa, deliciosa y enorme gama de grises, me ha agradado enormemente encontrar en los procelosos mares de internet el blog de Francisco Veiga, profesor de historia contemporánea de la UAB, experto en los no menos ajetreados Balcanes y al que conocí en Belgrado en 1993 cuando me dirigía a Pale, la guarida montañosa del ahora felizmente detenido Radovan Karadzic.
En resumen, lean su análisis Georgia: una rosa con demasiadas espinas.