UN MUNDO MAS TERRORISTA
En el último año se ha triplicado el número de atentados terroristas en todo el mundo, según el informe titulado Country Reports on Terrorism que ha elaborado la oficina de Contraterrorismo del gobierno de Estados Unidos. Uno de los lugares donde más se han incrementado los atentados ha sido Irak.
Según el informe, los terroristas pretenden convertir a Irak en “un crisol, un campo de entrenamiento y un centro de adoctrinamiento” de radicales islamistas de todo el mundo, como lo fuera Afganistán en la década de los 80 “para la generación anterior de combatientes de la Yihad”. Hay que recordar que “la generación anterior de combatientes de la Yihad”, entre los que se encontraba Osama Bin Laden, fue decisivamente impulsada por la CIA para luchar contra los ocupantes soviéticos, tal como recuerda el ensayo Afghanistan: The Making of U.S. Policy, 1973-1990.
Por lo que respecta a la principal razón esgrimida para justificar la invasión de Irak, es decir, la existencia de temibles armas de destrucción masiva en manos de Sadam Hussein, las conclusiones elevadas al presidente de Estados Unidos por la comisión encargada de evaluar las capacidades de la Inteligencia de Estados Unidos para comprobar la el almacenamiento o la fabricación de Armas de Destrucción Masiva por parte iraquí, no puede ser más contundente. En un informe de 618 páginas los expertos de la comisión sentencian: “Concluimos que la Comunidad de Inteligencia se equivocó gravemente en casi todos sus juicios previos a la guerra sobre las Armas de Destrucción Masiva (ADM) de Iraq. Sus causas principales fueron la incapacidad de la Comunidad de Inteligencia para obtener buena información sobre los programas de ADM iraquíes, errores serios en el análisis de la información obtenida y fallos a la hora de clarificar que cantidad de sus análisis estaban basados en suposiciones más que en pruebas fehacientes. En una materia de esta importancia, simplemente no podemos permitirnos fallos de esta magnitud”.
Según el informe, los terroristas pretenden convertir a Irak en “un crisol, un campo de entrenamiento y un centro de adoctrinamiento” de radicales islamistas de todo el mundo, como lo fuera Afganistán en la década de los 80 “para la generación anterior de combatientes de la Yihad”. Hay que recordar que “la generación anterior de combatientes de la Yihad”, entre los que se encontraba Osama Bin Laden, fue decisivamente impulsada por la CIA para luchar contra los ocupantes soviéticos, tal como recuerda el ensayo Afghanistan: The Making of U.S. Policy, 1973-1990.
Por lo que respecta a la principal razón esgrimida para justificar la invasión de Irak, es decir, la existencia de temibles armas de destrucción masiva en manos de Sadam Hussein, las conclusiones elevadas al presidente de Estados Unidos por la comisión encargada de evaluar las capacidades de la Inteligencia de Estados Unidos para comprobar la el almacenamiento o la fabricación de Armas de Destrucción Masiva por parte iraquí, no puede ser más contundente. En un informe de 618 páginas los expertos de la comisión sentencian: “Concluimos que la Comunidad de Inteligencia se equivocó gravemente en casi todos sus juicios previos a la guerra sobre las Armas de Destrucción Masiva (ADM) de Iraq. Sus causas principales fueron la incapacidad de la Comunidad de Inteligencia para obtener buena información sobre los programas de ADM iraquíes, errores serios en el análisis de la información obtenida y fallos a la hora de clarificar que cantidad de sus análisis estaban basados en suposiciones más que en pruebas fehacientes. En una materia de esta importancia, simplemente no podemos permitirnos fallos de esta magnitud”.
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